Situado en Doñinos de Salamanca, a escasos 4 km de Salamanca, este singular museo sorprende por su arquitectura brutalista y por la colección de escultura en hormigón que alberga. Es un museo único, concebido por el propio artista, como ”una escultura que contiene muchas esculturas.”

En su interior acoge la obra del escultor, una colección de más de 110 obras en hormigón que muestra la evolución de este artista plástico a lo largo de tres décadas, desde la figuración expresionista inicial de los años 60 hasta la abstracción minimalista de su etapa final en la década de los 90.

Su escultura de madurez, enmarcada en la abstracción constructivista, se define y distingue por su carácter monumental y arquitectónico, rasgos que potencia el material que empleará de forma fiel toda su trayectoria, el hormigón. La identificación entre escultura y material llevó al propio autor a denominarlo Museo del Hormigón, en claro homenaje al material que dio sentido a su escultura.

El edificio consta de tres salas que muestran las distintas etapas del escultor; fue construido por el propio artista en 1999, si bien no abrió sus puertas hasta 2002. Tras dos años abierto bajo gestión municipal, se mantuvo cerrado hasta que en 2018 la familia del escultor constituyó una fundación para su gestión. Así en 2019 reabrió sus puertas con horario regular. Hoy día el período de apertura es de abril a octubre.

El MÁM alberga una colección de escultura tan fundamental del arte contemporáneo como desconocida para el gran público. Una inestimable joya artística de imprescindible visita para todo amante del arte.