La librería Lello, a menudo conocida como librería Lello y Hermano o librería Chardron, es una librería situada en el corazón del casco antiguo de Oporto. Se encuentra en el número 144 de la Rua das Carmelitas, cerca de la Torre dos Clérigos (un campanario barroco, construido por Nicolau Nasoni).

La librería ha sido calificada como una de las más bellas del mundo por diversas personas y organizaciones debido a su importancia histórica y artística, entre ellas el autor español Enrique Vila-Matas, el periódico británico The Guardian y la editorial australiana de guías de viaje Lonely Planet.

Debido a la percepción generalizada de que J.K. Rowling se vio influenciada por el diseño interior del edificio para su serie de Harry Potter, ha crecido hasta convertirse en un importante destino turístico, con un millón de visitantes en 2018. A finales de mayo de 2020, J.K. Rowling se encargó de desmentirlo a través de su cuenta personal de Twitter.

El negocio se fundó en 1869 en la Rua dos Clérigos, n.o. 296-298 de Oporto con el nombre de "Librería Internacional de Ernesto Chardron". Cuando su creador falleció inesperadamente a la edad de 45 años, fue adquirida por la sociedad "Lugan & Genelioux Sucessores", que pronto tuvo como propietario sólo a Mathieux Lugan. Tres librerías de Oporto que pertenecían a A. R. da Cruz Coutino, Francisco Gomes da Fonseca y Paulo Podestá fueron adquiridas por la librería Chardron en 1891.

Mientras tanto, José Pinto de Sousa Lello y su cuñado David Lourenço Pereira crearon en 1881 un negocio dedicado principalmente al comercio y la publicación de libros. Pero una vez que Pereira falleció, Sousa Lello decidió trabajar con su hermano, António Lello. Mathieuz Lugan transfirió la propiedad de la Librería Chardron a los dos hermanos el 30 de junio de 1894, cambiando el nombre del negocio a José Pinto de Sousa Lellao & Irmo. La librería fue explotada por los dos hermanos hasta 1919.

El edificio de la librería, creado en 1906 por el ingeniero Francisco Xavier Esteves, tuvo un importante impacto cultural en la época, principalmente por su decoración y diseño. A la inauguración del edificio, el 13 de enero de 1906, asistieron importantes escritores, artistas y políticos portugueses, como Guerra Junqueiro, Abel Botelho, Joo Grave, Bento Carqueja, Aurélio da Paz dos Reis, José Leite de Vasconcelos y Afonso Costa.

El 24 de mayo de 1919, el negocio pasó a llamarse "Librería Lello e Irmo, Lda.", y Raul Reis Lello, hijo de António Lello, se incorporó a la organización. Más tarde, en 1924, se incorporaron al negocio José Pinto da Silva Lello y Edgar da Silva Lello. El nombre de la librería pasó a ser "Librería Lello" sólo después de que José Pereira da Costa, yerno de António Lello, se incorporara al negocio en 1930. Cuando José da Costa dejó el negocio cinco años después, la librería pasó a llamarse "Lello & Irmo". António Lello falleció en 1953, y Raul Reis Lello en 1949. Edgar Pinto da Silva Lello y José Pinto da Silda Lello, que fallecieron en 1989 y 1971, respectivamente, se hicieron cargo del funcionamiento de la librería tras estos dos fallecimientos.

La librería se modernizó y se creó una nueva empresa, Prólogo Livreiros, S.A., para adaptarse a los tiempos.

de la que forma parte uno de los herederos de la familia Lello. En 1995, se renovó todo el espacio, se modernizó e informatizó el servicio y se construyó una galería y una zona de encuentro que, desde entonces, se ha convertido en un importante centro cultural para la ciudad de Oporto.

Desde el 23 de julio de 2015 se requieren cuatro euros para entrar en la librería; este precio está exento para la compra de libros. El coste de la entrada en julio de 2018 es de cinco euros. Con esta tarifa se contabiliza el elevado número de turistas que visitan la librería. En la actualidad, se contabilizan diariamente más de 3.000 viajeros. Además, sirve para producir ingresos porque es probable que la librería tenga que realizar alguna obra de restauración en algún momento debido al constante tráfico que daña el edificio. Las ventas de la Librería Lello se han triplicado en sólo tres meses gracias a la imposición de esta tasa.

Las renovaciones internas de los escaparates y la fachada se inauguraron el 30 de junio de 2016. La primera fase del proyecto se financió en parte con las tarifas de entrada. Por primera vez desde su creación, se desmontó la vidriera de 55 paneles de cristal, construida por el arquitecto holandés Gerardus Samuel van Krieken. El cristal se limpió, se restauró y se arreglaron los desperfectos, devolviendo un brillo que se había perdido durante un tiempo.

Más de un millón de personas visitaron la librería solo en 2016, lo que equivale a más de 3.000 visitantes diarios. Según los datos, el 40% de los visitantes eran de origen español, seguidos de un 15,9% de franceses, un 15,2% de portugueses, un 6,6% de brasileños, un 4,6% de alemanes y un 3,1% de estadounidenses.

La publicación inglesa The Guardian la clasificó como la tercera librería más bonita del mundo en 2008, mientras que Enrique Vila-Matas la calificó como "la librería más bonita del mundo".

La Librería Lello, una de las estructuras más icónicas del estilo neogótico portugués, fue construida según un plan del ingeniero Xavier Esteves y destaca significativamente en el entorno urbano cercano. La arquitectura y los componentes ornamentales de este conjunto demuestran el estilo preeminente de principios del siglo XX.

La fachada consta de dos ventanas laterales, una entrada central y un gran arco abatible. Encima se ven tres ventanas rectangulares, cada una flanqueada por una pintura de José Bielman de una figura que representa el "Arte" o la "Ciencia". Tres pilares con agujas encima y aberturas arqueadas de estilo neogótico completan la fachada. Las ventanas están rematadas con carteles recortados. Motivos vegetales, motivos geométricos y la inscripción "Lello e Irmo" bajo las ventanas completan la decoración.

Los pilares que el escultor Romo Jnior utilizó para crear los bustos de los autores Antero de Quental, Eça de Queirós, Camilo Castelo Branco, Teófilo Braga, Tomás Ribeiro y Guerra Junqueiro, bajo las marquesinas, sostienen los arcos rotos del interior. Los aspectos más notables de la librería son los techos tallados, la gran vidriera con el lema de la librería, "Decus in Labore", y la amplia escalera que conduce al primer piso.

Otra característica muy conocida de la librería Lello es su escalera. Como J.K. Rowling se trasladó a Oporto para trabajar como profesora de inglés en una academia, se ha sugerido que sirvieron de modelo para las escaleras de Hogwarts en los libros de Harry Potter. Sin embargo, no es cierto que en esta librería se haya rodado ninguna escena de las películas de Harry Potter.