Desde el salón, se accedía a la habitación de matrimonio. Originariamente, en este humilde cuarto, dormían Otero Pedrayo y su mujer, Fita. A mano izquierda, se puede ver una fotografía del matrimonio con doña Eladia, la madre de Otero Pedrayo. Una mujer fuerte que quedó viuda siendo muy joven y que supo gestionar la hacienda de Trasalba para que a su único hijo no le faltara nada. El escritor y su madre tuvieron siempre una relación muy estrecha, estaban muy unidos.